Relato original
En un reino mágico, se escondía un mundo gélido y maravilloso, tan eterno como el tiempo mismo. Era un lugar donde los cuentos de hadas se entrelazan, formando una sinfonía de maravillas inimaginables. Este rincón secreto, oculto tras una puerta que conectaba los destinos de los cuentos más emblemáticos, era conocido como el Nexo de los Sueños.
En este mundo, reinaba la Reina de las Nieves, cuya belleza gélida rivalizaba con la de la malvada bruja que había envenenado a Blancanieves. Su palacio de hielo, brillaba como el diamante más puro. Aunque su corazón estaba helado, ansiaba descubrir el misterio que guardaba el cofre de Alí-Babá.
Un día, la Reina de las Nieves, deseosa de poseer el cofre, envió a su ejército de criaturas mágicas a buscarlo. Estas criaturas, recorrieron diferentes lugares desde el pueblo de Storybrooke hasta el reino de Arendelle.
Pero el cofre solo podía ser abierto por un ser puro de corazón, y en ese momento, la Reina de las Nieves no lo era.
En su búsqueda, los mensajeros de la Reina de las Nieves se encontraron con un misterioso portal, una puerta del tamaño de un cascanueces, que los llevó a otro rincón del Nexo de los Sueños. Allí, se toparon con un fauno llamado Tumnus, quien deambulaba por el bosque.
Tumnus, con su corazón puro, fue el elegido para abrir el cofre de Alí-Babá. Cuando lo hizo, el tesoro que guardaba no era oro ni gemas, sino una flor mágica que tenía el poder de derretir los corazones helados. Al entrar en contacto con la Reina de las Nieves, la flor comenzó a liberar su cálida magia, suavizando el frío que aprisionaba el corazón de la reina. Esta, emocionada por su transformación, finalmente decidió dejar atrás su búsqueda de poder.
En un reino mágico, se escondía un mundo gélido y maravilloso, tan eterno como el tiempo mismo. Era un lugar donde los cuentos de hadas se entrelazan, formando una sinfonía de maravillas inimaginables. Este rincón secreto, oculto tras una puerta que conectaba los destinos de los cuentos más emblemáticos, era conocido como el Nexo de los Sueños.
En este mundo, reinaba la Reina de las Nieves (1), cuya belleza gélida rivalizaba con la de la malvada bruja que había envenenado a Blancanieves (2). Su palacio de hielo, brillaba como el diamante más puro. Aunque su corazón estaba helado, ansiaba descubrir el misterio que guardaba el cofre de Alí-Babá (3).
Un día, la Reina de las Nieves, deseosa de poseer el cofre, envió a su ejército de criaturas mágicas a buscarlo. Estas criaturas, recorrieron diferentes lugares desde el pueblo de Storybrooke (4) hasta el reino de Arendelle (5).
Pero el cofre solo podía ser abierto por un ser puro de corazón, y en ese momento, la Reina de las Nieves no lo era.
En su búsqueda, los mensajeros de la Reina de las Nieves se encontraron con un misterioso portal, una puerta del tamaño de un cascanueces, que los llevó a otro rincón del Nexo de los Sueños. Allí, se toparon con un fauno llamado Tumnus (6), quien deambulaba por el bosque.
Tumnus, con su corazón puro, fue el elegido para abrir el cofre de Alí-Babá. Cuando lo hizo, el tesoro que guardaba no era oro ni gemas, sino una flor mágica que tenía el poder de derretir los corazones helados. Al entrar en contacto con la Reina de las Nieves, la flor comenzó a liberar su cálida magia, suavizando el frío que aprisionaba el corazón de la reina. Esta, emocionada por su transformación, finalmente decidió dejar atrás su búsqueda de poder.
(1) La reina de las nieves, de Christian Andersen
(2) Blancanieves
(3) Alí-Babá y los 40 ladrones
(4) Once upon a time
(5) Frozen
(6) Las crónicas de Narnia: El león, la bruja y el armario
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